En los años 80 del siglo pasado aparecieron los primeros manuales sobre gestión
del tiempo, de entre las que fue especialmente influyente Los 7 hábitos de la
gente altamente eficaz, de 1989, de Stephen R. Covey, quien creía que la
esencia de la gestión del tiempo se
resumía en "organizar y ejecutar según prioridades". Precisamente, su superventas fue durante
meses su prioridad, pues alcanzó los 25 millones de ejemplares vendidos. Casi
30 años después seguimos preocupados por la gestión de un tiempo que decimos
que no tenemos y los libros, aplicaciones y cursos sobre su optimización abundan.
En esta línea, recientemente he leído Lidérate.
Método Fase. El método definitivo para ser
más productivo (Plataforma Editorial), de Agustín Peralt, quien incide en
conceptos obvios pero que es necesario recordar de vez en cuando, como el hecho
de que "no te faltan horas, te sobran distracciones," y si no
pensemos todo el tiempo diario que a menudo perdemos (sí, perdemos) yendo de
una tontería a otra en twitter buscando emojis para whatsapp prescindibles… Habla asimismo en el libro de las cuatro haches que mejoran
tu productividad: Hambre (una motivación), Honestidad (no te engañes a ti
mismo), Humildad (admite que tu sistema no funciona) y Hacer (actitud orientada
a la acción).
El autor, asesor de directivos, conferenciante y experto en productividad, hace una curiosa clasificación de tipos de personas según su manera de trabajar y propone un método,
el FASE, para alcanzar la eficiencia a partir de ciertos ejercicios que ayudan
a hacer un trabajo en el menor tiempo posible, focalizándose en lo realmente
importante. Es un método que, además, tiene en cuenta y trabaja los niveles de
energía del usuario para no sufrir recaídas que puedan afectar a la calidad
de la tarea. Y aunque el lector no vaya a seguir paso a paso el método y se
quede solo con parte del mismo, el manual es una invitación a sincerarse,
a analizarse y, como mínimo, saber que es
posible organizarse, priorizar, hacer listas de tareas en función de su
urgencia y su importancia, asignar tiempos de premio y descanso y, lo que es
más importante, crear hábitos de trabajo que perduren en el tiempo. Una lectura
muy productiva, ágil y útil. Muy
adecuado ahora, en vacaciones, momento de
buenos propósitos para la nueva temporada.